FREUD: GENIO Y FIGURA

Este título es pésimo. Lo viste mil veces, antecedido por lo nombres de los próceres más variados. Es terrible. Huele a biografía. Los artículos que le siguen a este tipo de título son en general aburridos y casi heroicos. Además de muy extensos, claro.

Ahora bien, ¿por qué Freud se convirtió en una de esas personas de las que escribimos: genio y figura?

Todos lo sabemos, es muy simple. Porque es el padre del psicoanálisis, porque descubrió el inconsciente, la sexualidad infantil y por qué tu mamá no te deja crecer en paz. Creó la disciplina del psicoanálisis (no digo “ciencia” para no despertar discusiones estériles) que vive hasta nuestros días, lo que no es poco, aunque todos los años se vaticina su cada vez más pronta desaparición.

Pero ¿de dónde salió este tipo? ¿¿¿Qué hizo para convertirse en un genio??? ¿Cómo lo hizo?

Porque modificar la creación de otro es más fácil. Lacan, que lo segundeó, ya tenía el psicoanálisis inventado. Por más difícil que escriba, más enrevesado o mucho mas técnico que parezca no hizo más que darle una vuelta de tuerca a la creación freudiana (maravillosa vuelta de tuerca, desde ya!)

¿Qué es lo que realmente hay para aprender de este “genio y figura”? Es claro para mí: SU MÉTODO. Y no me refiero al método del psicoanálisis sino al método de Freud.

Dejemos de mirar el lado amable de la historia. Porque de lo que salió bien todos, mal que mal, sabemos. Por eso llegó hasta nosotros.

Te lo digo así, este tipo que es un genio NO tiene un historial exitoso. Son todos un fracaso, no ayudó a nadie, muchos veces los empeoró ya que no tenía delimitados los campos de neurosis y psicosis y trataba a todos igual con las terribles consecuencias. Opinó sobre un ser humano, lo diagnosticó, a través de sus escritos, siendo que jamás lo había visto. No logró retener a Hitler en tratamiento. No encontró una sola cosa graciosa para decir en “El chiste y su relación con lo inconsciente”. Siendo que dio unas 30 conferencias, alentaba a la gente desde la primera a no volver a verlo, a no leer sus escritos, ni a intentar creer en lo que decía. Criticó a todos sus colegas. Vendió su obra a partir de “La interpretación de los sueños” al que lleno de interpretaciones “uno a uno” (biunívocas) de donde se desprendieron un montón de análisis de sueños salvajes. Siendo que el inconsciente de cada uno habla un lenguaje único, nos dijo que soñar con carteras, monederos o bolsos varios era soñar con genitales femeninos. Jamás se reconoció como el misógino consuetudinario que era, prefirió decir que la mujer era un “dark continent”. Acusó de homosexuales a quienes no lo eran intentando “reconducir” sus pulsiones al objeto “correcto”. Era tan homofóbico que no reconoció a quienes realmente lo eran. Experimentó primero y teorizó después. Et caetera, et caetera…

Entonces, ¿qué le festejamos? ¿Cómo llegó tan lejos? Justamente, haciendo todo esto. El genio de este hombre está en haberse animado, en haber logrado pensar en categorías que no tenía a priori, en haber creado un mundo, haberle dado leyes y razones. En haberse opuesto a su época, haberse enfrentado a sus colegas, a la moral de época, a la ciencia de época!!. En haber defendido a muerte lo que creía cierto, sin importar todas las constantes oposiciones, las desvalorizaciones, las acusaciones.

Logró desprenderse de todo lo que había aprendido (todo el back biológico, neurológico que era su base). Inventó una disciplina de cero, construyendo paso a paso sobre sus experiencias.

Tuvo la humildad de reconocer sus errores, la grandeza de puntuarlos claramente para que otros no los cometieran sin siquiera verlos. Se desdijo todas las veces que necesitó desdecirse, se corrigió: no sumando “versiones” sino claramente,-“lo que dije antes era incorrecto, más bien deberíamos decir…”.

Este tipo que temía y dudaba como vos, pudo más. Pasó sobre sí mismo como nadie, construyendo, creando, pensando que “era posible”.

Ciertamente no todos, podemos regodearnos en ser poseedores de semejante personalidad, de semejante “madera”; pero no creo que él supiera todo esto de antemano. Este es el Freud para todos: ¿por qué no intentarlo?

 

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6 Comentarios
  1. Fer
  2. Divan el Terrible