Temaikén

Actualmente, los pilares de un zoológico son cuatro: entretenimiento, educación, investigación y conservación y reproducción de fauna en peligro de extinción (por supuesto, no todos los cumplen), muy diferentes a los que se mantenían algunos años atrás. De todas maneras, vamos a tener argumentos para todos los gustos: que a los animales les quitan su libertad, que el concepto de libertad es diferente para hombres y animales, que esta comprobado científicamente que si se respetan los requerimientos básicos del hábitat de origen vivirán bien, que no hay otra manera que podamos ver en vivo y en directo ciertas especies, que muchos hábitats naturales desaparecieron y entonces los zoos son herramientas importantes para la conservación de la especie…. Ok, dejemos la cuestión filosófica, ético, moral, etc. etc. ya que no viene al caso.

El cartel a la entrada

Si alguna vez visitaron un zoo, Temaikén es completamente diferente: si bien es una Fundación, donde uno puede adoptar un animal para colaborar, tiene programas educativos con becas, y donde se cumplen los objetivos sobre los que le hablaba antes (pueden encontrar todo eso en la página del lugar), voy a centrarme en lo que es el recorrido mas bien turístico, por decirlo de alguna manera, y que podemos encontrar ahí.

Básicamente, mas que un zoológico, es un parque temático, es decir, allí se desarrollan actividades de recreación y está compuesto de “áreas específicas que desarrollan determinados temas, presentando una imagen fácilmente identificable”; en este caso, 156 mamíferos de 26 especies, 382 aves de 28 especies, 63 reptiles de siete especies, 4800 peces de 55 especies y 6000 mariposas de 27 especies diferente, están ubicados en un espacio lo mas parecido posible al de origen (incluyendo la flora) y distribuidas en las 34 hectáreas donde se recrean los tres grandes hábitats (agua, tierra y aire).

Mapas para no perderse!

El parque, se encuentra dividido en cuatro sectores, Acceso, África, Asia y Fauna Autóctona; el Lugar de las Aves, forma parte de Temaikén, pero también tiene su entrada independiente. El recorrido es largo, puede llevar todo el día si nos detenemos a ver cada una de las especies, pero vale la pena; igualmente, tiene bancos donde descansar y en el verano, hay una especie de humidificadores que les aseguro que son mas que útiles (una especie de ducha con agua muuy fina que no llega a mojar pero refresca). En la entrada les dan un mapa; no lo guarden! Mantengalo en la mano, porque es tan útil como las falsas duchas, para poder caminar sin repetir lugares (de todas maneras, cada tanto encuentran indicadores o mapas).

El mundo en mármol

Ya a la entrada, uno se da cuenta que no es un lugar común, que hay muchísimo esfuerzo muchisimo (y dinero) invertido en el diseño y mantenimiento del lugar: educadores, veterinarios, operarios de la construcción, arquitectos, ingenieros, biólogos, artistas, asesores y consultores especializados diseñaron este paseo para que sea atractivo mas allá de la exhibición de animales, con caminos y puentes de madera, donde todo es agradable a la vista. No van a encontrar rejas (salvo en las aves, por supuesto) ni barrotes (a veces un blindex), y cada especie tiene un cartel donde figura el nombre de la especie, hábitat original, comportamiento y alimentación.

Bongos descansando Carteles que explican todo

Un paisaje
En el sector de Africa, hay diferentes aves y mamíferos de ese continente: hipopótamos (un sector esta al aire libre, pero hay otro donde se los puede ver por debajo del agua y se los recomiendo; incluso hay un horario donde se puede ver como les dan de comer) flamencos rosados, pelícanos, antílopes, lemures, cebras, suricatas (unos de los bichos mas simpáticos que vi en mi vida!).

Flamencos

Suricata!

Colobo Otro cartel que explica

Hipopótamo Hipopotamo bien cerquita

El sector Asiático incluye, entre otros, al tigre de Bengala blanco que es una de las grandes atracciones, ardillas, pero si duda lo mas impresionante, por lo menos para mí, son los murciélagos (la especie es la más grande del mundo) que se encuentran en un sector especialmente acondicionado, parecido a un invernadero, y donde se los puede ver de cerca, muy cerca.

Murciélagos, no se lo pierdan! Tigre de Bengala

Dentro de lo que es la fauna autóctona, hay dos sectores, el de la mesopotamia y el área patagónica que recrea los seis ambientes característicos de esa región; allí encontramos la pinguinera, los cóndores, el camino subterráneo que permite ver de cerca a los pumas, y en la oscuridad, a las mulitas, entre otras especies.

Pinguinera Condor

Quizá lo que menos me impresionó, (y hasta me aburrió un poco) fue el sector de 60 hectáreas de las aves, que fue donde empezó el proyecto Temaikén. Yo lo dejaría para el final, cuando ya no tienen nada mas que ver y les queda tiempo (opinión personal, por supuesto).

También tienen sectores especiales que si vale la pena visitar. Uno es el Acuario, que está dividido en La Poza de Marea (especies que quedan depositadas en las crecientes y bajantes), el Acuario de Agua Dulce (peces de los ríos argentinos) y el Acuario Marino (diversas especies del Mar Argentino). Todo ese sector se recorre de una manera muy especial: es subterráneo, entonces por tu cabeza pasan los tiburones y a los costados ves desde estrellas de mar hasta rayas; la sensación es genial.

Otro de estos sectores “especiales” es el Cine 360; quizá piensen que es aburrido o que no vale la pena entrar; yo pensaba lo mismo (ir a un zoológico al aire libre para meterse en un cine no parece lo ideal) pero les aseguro que tienen que visitarlo, es un viaje a través del espacio y del tiempo, desde los comienzos (allá lejos y hace tiempo) hasta la actualidad. Muchas veces hay que hacer cola, pero les repito, no dejen de visitarlo (como mucho tendrán un poco de dolor de cuello a la salida pero vale la penaa!!).

Por supuesto, todoooo esto se complementa con varios sectores para almorzar o merendar, heladerías, puestos de gaseosas y… no podía faltar… el sector de los recuerdos! (que lo que van a recordar son los precios, no es nada barato pero tiene cosas simpáticas).

Todo lo que les conté, es solo un poco de lo que es este parque temático; es una visita para hacer un domingo, cercana a la Capital, muy linda para hacer con chicos (hay sectores con actividades didácticas) o sin ellos y no es cara para todo lo que van a ver (mayores, $15; los chicos de 3 a 10 años, $5 y jubilados $10). Se encuentra en Belén de Escobar, a 50 km de Capital Federal: si van en auto, deben tomar el Acceso Norte, Ramal Escobar y hacia el km. 50 hay que bajar en la ruta 25; a 700 metros a la izquierda está el ingreso. La otra opción, es tomar el colectivo 60 ramal Escobar los deja en la puerta.
Acá les dejo el link de Temaikén, por si les interesa conocer un poco que es lo que se hace allí como fundación, donde figuran también días y horarios del parque.

Nos leemos la próxima!

Los precios actualizados a Noviembre de 2009:

Mayores, $48; los chicos de 3 a 10 años, $35 y jubilados $35 . Los dias martes, todas las entradas salen un 50 % menos

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